Realmente comenzó con un par de zapatos, nuestros Balmorals para ser exactos. Estaba investigando un anuncio de época de Marcy & Haynes, un vendedor de zapatos de Hartford, Connecticut, y me atrajo inicialmente el eslogan "Los zapatos cálidos a veces ahorran las facturas de un médico".

Un anuncio del negocio vecino, encima del de la zapatería Marcy & Haynes.

I

Entonces comencé a preguntarme quiénes eran y si jugaron un papel más importante en el escenario del siglo XIX. Esto me llevó a descubrir una de sus monedas fraccionarias personales que había salido a subasta. Esta moneda estaba respaldada por el Phoenix Bank, también ubicado en Hartford.

La búsqueda del banco Phoenix condujo a una imagen del propio banco, que era un edificio de hierro con una fachada de piedra, coronado por una escultura de un fénix emergente. El tallador de piedra aparentemente vendió tantas de estas aves como pudo, se montó otra escultura de Phoenix sobre la bóveda. Estas imágenes llevaron a buscar otras vistas de Main Street en Hartford, ya que la ubicación de Marcy y Haynes estaba a solo unas pocas puertas del banco.

location of Marcy and Haynes was only a few doors down from the bank.

I did find a 

bóveda del banco phoenix

Encontré algunas otras fotos del banco, mirando tanto al norte como al sur desde un punto de vista similar. Por extraño que parezca, los anuncios de los periódicos no siempre daban las direcciones de las calles, presumiblemente porque solo servían como un recordatorio subconsciente de lo que la población local ya sabía.

Luego vino la vista estéreo, mostrando la vista desde el banco, mirando hacia el sur. Guardé la imagen y la recorté, pero nada estaba claro... Me sorprendió descubrir que las imágenes izquierda y derecha tienen una agudeza diferente. La imagen de la derecha es más nítida y muestra los letreros y las direcciones de los edificios con mayor claridad.

Básicamente sería un paseo por la calle desde el punto de vista de la cámara. El anuncio del vecino produjo una dirección y también la idea de que la numeración podría aumentar tanto vertical como horizontalmente. Haberdasher, J. W. Bunce, en 307, resultó ser un miembro activo de los Hijos de la Templanza durante la guerra. El dentista, CM Hooker, en 297 Main Street, fue uno de los primeros en usar óxido nitroso durante los procedimientos.

Signo de dentista

Más abajo en la calle había un indicador, el nombre "Kelsey & H---". Mirando hacia arriba, la firma había sido una sociedad entre William H. Kelsey, James P. Carpenter y Henry P. Hitchcock, que se disolvió el 5 de febrero de 1866, momento en el que Kelsey y Hitchcock comenzaron su firma de ropa Merchant Tailoring and Ready-Made. . Ese cambio en la asociación se captura en esta imagen.

Es cuando caminamos de regreso por la calle, hasta 313 Main Street, la librería Brown and Gross, que se gira la perilla de un siglo de tiempo, abriendo una puerta a la historia nacional. Brown and Gross había cambiado de sociedad varias veces, pero permaneció en funcionamiento continuo hasta 1993. Se dice que Harriet Beecher Stowe y Mark Twain estaban entre sus patrocinadores. Historia de la librería Brown and Gross.

Durante su campaña para las elecciones, Lincoln se detuvo en Hartford el 6 de marzo de 1860. Directamente al otro lado de la calle de la librería estaba el edificio de la capital del estado; las imágenes fueron tomadas con el fotógrafo de espaldas al edificio. Se documentó que se reunió con Gideon Welles, representante de Connecticut en el Comité Nacional Republicano, frente a la tienda de Brown and Gross, sentado en un banco, muy posiblemente el banco de la imagen. Estar a poca distancia de la sede del gobierno estatal hace que la historia sea plausible. Lincoln en Hartford en marzo de 1860

Por otro lado, es interesante notar la cantidad de estudios fotográficos en las proximidades del edificio Capital, lo que claramente lo convierte en el asiento del pájaro gato para el comercio.

Las piezas de este mosaico estaban todas allí, disponibles para cualquiera. El paso del tiempo había secado el mucílago de la familiaridad, esparciendo las tejas. Los historiadores se apresuran a descartar la historia viva, como si el aspecto más visible, es decir, la interpretación con atuendos de época, fuera el único producto final. En verdad, el viaje real recorre los mismos caminos de la historia académica, dando como resultado un objeto tridimensional tangible. Este viaje no solo requiere una comprensión de las industrias detrás de él, los fabricantes y minoristas, sino también su papel en la sociedad. La historia viva nos presenta a estas personas, renovando los lazos polvorientos de la familiaridad con el lugar y el tiempo, elevando lo ordinario a un punto de reverencia.

Este paseo por Main Street Hartford de 1860 comenzó con un par de zapatos de reproducción.